El estado sionista-fascista de Israel lleva más de 600 días de criminales ataques a la población palestina de Gaza y llevando adelante un verdadero genocidio, reconocido cada día más por instituciones y gobiernos a nivel internacional. Genocidio que ha cobrado ya cerca de 60.000 vidas de palestinos, en gran parte niños, mujeres y ancianos y que continúa la limpieza étnica comenzada con la Nakba hace 77 años.
Luego de esto, el 13 de junio pasado comienza su ataque contra Irán, en el que empleó 200 aviones de combate de última generación provistos por los EE.UU, con el que ha golpeado fuertemente las infraestructuras militares del país, asesinando también a importantes mandos militares y científicos iraníes vinculados al desarrollo nuclear. Ataque que ha sido respondido por el ejército iraní en base a su arsenal misilístico, creando una grave situación en el propio Israel.
Al mismo tiempo y con el pretexto de que Irán estaría desarrollando armas nucleares, el imperialismo yanqui, realiza el 21/6 un ataque contra tres centrales nucleares, con sus bombardeos B2, provistos de las bombas no nucleares más poderosas que existen hoy. Estos hechos ponen al Medio Oriente y al mundo entero ante una gran escalada de la guerra de agresión, ahora abiertamente impulsada por Israel y el propio imperialismo yanqui. El estado sionista de Israel ha sido históricamente la punta de lanza del imperialismo yanqui-occidental para controlar y explotar esta región fundamental en la producción petrolera y gasífera, que es estratégica también por su ubicación geográfica.
El imperialismo yanqui con el fascista Trump a la cabeza, se ha involucrado de esta forma en esta guerra ´porque si bien sigue siendo la principal superpotencia, por su poderío, económico, político y militar, está claramente en declinación y asediada por el imperialismo Chino, principalmente en lo económico-comercial y por otras potencias imperialistas como Rusia que ha recuperado poderío militar y ya busca ampliar su peso internacional, sobre todo con la guerra de agresión a Ucrania.
Ante esta situación que incluso agrava el peligro de un nueva guerra mundial, convocamos a la clase obrera y el pueblo uruguayo a redoblar la solidaridad activa con el heroico pueblo palestino, exigiéndole al gobierno del FA una clara condena al genocidio en curso en Gaza, el correspondiente rompimiento de las relaciones diplomáticas con Israel, el cierre de la oficina de ANII en Jerusalén, el cese de las exportaciones de carne y toda actividad que apoye a la potencia genocida y belic
Al mismo tiempo convocamos a la solidaridad con Irán y su pueblo que nuevamente enfrentan una guerra de agresión por defender su independencia y sus recursos naturales, y por su apoyo a la justa causa palestina. La resistencia de Irán es objetivamente parte de la lucha antiimperialista a nivel internacional y merece el apoyo del proletariado y los pueblos oprimidos del mundo.
La clase obrera y el pueblo de Irán en su lucha por su liberación nacional y social no pueden esperar nada de los imperialistas más que destrucción y mayor explotación.
Partido Comunista Revolucionario del Uruguay
22 de junio de 2025
